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El 19 de agosto de 1839 fue el día en el que Francia patentó el sistema con el que se conseguía fijar una imagen sobre una superficie de metal. De ahí que tal día como hoy, 19 de agosto, se celebre el Día Mundial de la Fotografía. Pero la controversia sobre qué fotografía fue la primera de la historia sigue en pie.
La primera foto de la historia fue tomada por Joseph Nicéphore Niépce en 1822. La fotografía representa una mesa puesta antes de comer (imagen principal que ilustra el artículo). Sin embargo, esta imagen no siempre fue considerada como la foto más antigua del mundo.
A continuación desvelamos todos los detalles y curiosidades sobre la primera foto de la historia.
La historia y precedentes de la fotografía no se puede entender sin Joseph Nicéphore Niépce. Nació en la ciudad francesa de Chalon-sur-Saóne, en 1765. Provenía de una familia de clase media. Tras realizar varias carreras docentes y servir en el ejército regresó a casa en 1801 para administrar el patrimonio familiar.
En esta época desarrolló su interés por la ciencia. Comenzó a trabajar con su hermano Claude en varios inventos y experimentos. Aún así, su aportación decisiva a los orígenes de la fotografía no fue inmediata.
Los inicios de la fotografía se remontan a 1793. Los hermanos Niépce empezaban a discutir la posibilidad de utilizar la luz para reproducir imágenes.
El progreso del científico fue mas bien lento. La fotografía no era su único interés. Los hermanos Niépce invirtieron todo su dinero y esfuerzos en un motor de combustión destinado a la propulsión de barcos. Por eso, los primeros experimentos no comenzaron hasta 1816.
1814 marcó un antes y un después en su vida. Perdió a su hijo el cual contaba con grandes cualidades artísticas. Niépce aprovechó su experiencia como litógrafo y químico para buscar nuevas fórmulas para reproducir imágenes. La necesidad de inventar la fotografía nació por la incapacidad de Niépce para crear imágenes a mano. Era un mal dibujante.
Niépce comenzó a experimentar con el grabado litográfico, lo que le llevó a inventar la Heliografía.
Niepce no era un buen dibujante lo que le llevó a inventar la fotografía
Joseph Nicéphore Niépce acuñó el término Heliografía para identificar el proceso mediante el cual obtuvo sus primeras imágenes fotográficas.
Durante sus pruebas con la litografía realizó experimentos con la luz y la sensibilidad de barnices. Sin embargo no pudo lograr que las imágenes se decoloraran.
Descubrió entonces que obtenía mejores resultados utilizando una solución de betún de Judea. En 1822, Niépce construyó con éxito un heliógrafo de un grabado del Papa Pio VII. De esa fecha data también la primera foto conocida como La mesa puesta (imagen principal que ilustra el artículo).
«Esto es sólo una prueba, aunque imperfecta, pero con paciencia y trabajo se pueden hacer grandes cosas.» decía el inventor de la fotografía. Y no le faltaba razón.
Posteriormente realizó experimentos con betún en platos de estaño y zinc, los cuales podían ser entintados para la impresión. Sus mejores resultados los consiguió en 1826. En ese año obtuvo la copia de un grabado del Cardenal Georges d’Amboise. El grabado se conoce como la primera forma exitosa de reproducción fotomecánica.
A partir de entonces Niépce revistió una placa de peltre con la misma solución que utilizó en sus experimentos anteriores. Después colocaba esa placa en una cámara que apuntaba hacia afuera.
Aunque con algunos borrones y con escasa calidad consiguió la foto de La mesa puesta. Años después consiguió también la que hasta hace muy poco tiempo estaba considerada como la fotografía mas vieja y que vemos a continuación.
Tras una exposición de al menos 8 horas, Niépce lavó la placa utilizando una mezcla de aceite de lavanda y petróleo blanco, disolviendo con ello las partes del betún que no habían sido endurecidas por la luz.
Para conseguir las primeras imágenes necesitaban más de 8 horas
El resultado fue la imagen positiva y permanente, en la que se aprecia el patio, los árboles y el paisaje visto desde la ventana. La fotografía fue tomada desde una ventana del segundo piso en la finca donde vivía Niépce, en la región de Borgoña. Durante mucho tiempo fue considerada como la foto más antigua de la historia.
Roland Barthes, en su obra La cámara lúcida (1989), aseguró que la instantánea tomada desde la ventana data de 1826 o 1827. En cambio la imagen conocida como La mesa puesta, es de 1822. De hecho, el propio autor la bautizó como «La primera fotografía».
Además, el reconocimiento al trabajo de Joseph Nicéphore Niépce llegó tarde. Louis Daguerre, considerado como el primer divulgador de la fotografía, trató años mas tarde de ocultar su aportación decisiva.